Implantología
El IMPLANTE DENTAL es un pequeño cilindro de titanio que se coloca dentro del hueso, destinado a ser el sustituto artificial de la raíz de un diente perdido. Habitualmente tiene forma roscada y no producen reacción de rechazo permitiendo su unión al hueso.
La superficie del implante puede presentar diferentes texturas y recubrimientos, utilizadas para aumentar su integración al hueso.
Al reponer los dientes perdidos por medio de implantes se conserva mayor cantidad de hueso ya que este se reabsorbe al no recibir ningún tipo de estímulo.
SE REALIZA UNA LEVE INTERVENCIÓN INDOLORA PARA UNA SOLUCIÓN A LARGO PLAZO
Al igual que los dientes naturales, los dientes artificiales sobre implantes también requieren un control periódico y una higiene oral concienzuda.
Además de una planificación meticulosa y una colocación correcta del implante, los cuidados adecuados son uno de los requisitos más importantes para el éxito a largo plazo.
ALGUNAS VENTAJAS DE LOS IMPLANTES
- Son los que más se aproximan a los naturales desde el punto de vista estético y funcional.
- Se integran armoniosamente en la arcada dentaria.
- No se distinguen en la vida cotidiana de los dientes naturales en su función y aspecto.
- Constituyen una base sólida para las prótesis.
Los implantes evitan a los pacientes los inconvenientes de las prótesis convencionales, por ejemplo: Puntos de presión o problemas de fijación.
Permiten que el paladar no esté cubierto por el material de la prótesis, lo que tiene efectos positivos sobre la pronunciación y el sentido del gusto hacen innecesario el tallado de los dientes vecinos pueden evitar la atrofia del hueso.
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